Si estás planeando tu boda y sueñas con un lugar lleno de encanto, historia, buena gastronomía y un entorno natural único, La Herencia de Hiroshima, en Lorca, puede ser el escenario perfecto. Esta finca, con más de 40 años de experiencia en celebraciones, no solo ofrece un espacio de ensueño, sino que está rodeada de un destino lleno de posibilidades para ti y tus invitados.
A continuación, te damos 5 razones para celebrar tu boda en La Herencia de Hiroshima y convertir tu gran día en una experiencia completa.
1. lorca, una ciudad con historia y alma
Lorca no es una ciudad cualquiera. Su rico patrimonio histórico aporta un contexto único para cualquier celebración. A escasos minutos de la finca puedes visitar lugares como:
el castillo de lorca
También conocido como la Fortaleza del Sol, es una de las joyas medievales mejor conservadas de la Región de Murcia. Sus murallas y torres ofrecen vistas panorámicas de la ciudad y el valle, y en su interior podrás recorrer antiguos aljibes, zonas arqueológicas y exposiciones interactivas. Las visitas guiadas y las experiencias temáticas convierten este monumento en un lugar perfecto para vivir la historia de forma entretenida.
Plaza de España
Es el corazón histórico de Lorca. Está rodeada de auténticas joyas arquitectónicas como la Colegiata de San Patricio, una iglesia monumental declarada Bien de Interés Cultural; el Palacio de Guevara, de estilo barroco; y el imponente Ayuntamiento, con su fachada del siglo XVIII. Pasear por la plaza es como hacer un viaje en el tiempo, con la oportunidad de disfrutar de terrazas y cafés con encanto.
Museos
El Museo de Bordados del Paso Blanco es una parada imprescindible para conocer el arte textil que ha hecho famosa a Lorca en todo el mundo, especialmente por sus espectaculares bordados de Semana Santa, declarados Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad por la UNESCO. Junto a él, el Museo Arqueológico Municipal ofrece un recorrido por la historia de la ciudad desde la prehistoria hasta la época moderna, con piezas únicas que cuentan el pasado de esta tierra.
Además, la ciudad está llena de rincones con encanto: plazas barrocas, antiguos palacetes y calles empedradas que invitan a perderse antes o después de la boda. Este entorno ofrece también la posibilidad de planear sesiones de fotos diferentes.
2. una finca con elegancia y calidez en cada detalle
Lo que hace especial a La Herencia de Hiroshima no es solo su ubicación, sino el alma que transmite. Esta finca cuenta con espacios cuidadosamente diseñados para eventos. Su patio central tiene un ambiente íntimo y cinematográfico, ideal para bodas tanto de día como de noche, y su equipo humano destaca por su cercanía, profesionalidad y experiencia
Lejos de ser una finca más, La Herencia de Hiroshima se ha convertido en un referente en Lorca por su capacidad para adaptarse a cada pareja: cada celebración se personaliza y se vive con la emoción de lo único.
3. naturaleza, privacidad y aire mediterráneo
Situada en una zona tranquila, alejada del ruido y rodeada de paisaje rural, la finca ofrece el equilibrio ideal entre accesibilidad y desconexión. La brisa del Mediterráneo se deja sentir sin estar en la costa, y los atardeceres que se disfrutan desde sus jardines son un regalo tanto para los novios como para los fotógrafos.
Además, la cercanía a espacios naturales como las calas de Puntas de Calnegre o zonas de senderismo permite a los invitados prolongar su estancia en la zona y disfrutar de pequeños planes al aire libre. La celebración puede así convertirse en parte de una escapada o un fin de semana completo.
4. septiembre en lorca: cultura, fiesta y sabor local
Si estás pensando en casarte en septiembre, Lorca es un acierto. Durante este mes, la ciudad vibra con algunas de sus fiestas más queridas, como las celebraciones en honor a la Virgen de las Huertas o la esperada Feria de Lorca, que llena calles y plazas de conciertos, atracciones y un ambiente muy festivo.
Estas fechas ofrecen un valor añadido para tus invitados, que pueden aprovechar su visita para disfrutar de la cultura local. Desde espectáculos hasta gastronomía típica, la ciudad se convierte en un escenario vivo ideal para compartir momentos más allá del día de la boda.
5. una propuesta gastronómica que se recuerda
Sabemos que una de las cosas que más se comentan después de una boda es su comida. Y en este punto, La Herencia de Hiroshima no falla. Su cocina combina la tradición murciana con propuestas contemporáneas, ofreciendo menús personalizados, ingredientes de calidad y una presentación cuidada hasta el último detalle.
Más que un banquete, lo que aquí se vive es una experiencia culinaria. Desde el aperitivo hasta el postre, cada plato está pensado para sorprender, satisfacer y dejar huella. Y si a eso se le suma el entorno y el ambiente, el resultado es una celebración que se vive con los cinco sentidos.
En resumen: más que una boda, vives una experiencia completa
Lorca es historia, cultura, paisaje. Es un lugar donde el pasado y el presente se dan la mano para crear momentos especiales. Y La Herencia de Hiroshima es el espacio ideal para convertir tu boda en una celebración llena de significado, emoción y belleza.
Casarte aquí no solo es apostar por un lugar bonito: es dar valor a lo local, lo auténtico y lo cuidado. Es regalar a tus invitados una vivencia única. Y es comenzar tu historia en un lugar donde cada detalle cuenta.

